Me llamaron y a la vez me mandaron un mail, cuando estaba en el trabajo. En realidad, cuando me estaba por ir.
"Bueno podés ir a la planta hoy a las 3? Porque están un poco complicados, terminando de lanzar una campaña"...etc, etc...
"Mmmm, bueno, no se, quizá si llego, mmmm, bueno dale...".
Nervios.
Corriendo a casa, ¿por qué? Porque para variar había salido más tarde, por cosas de la vida.
Creo que llegué a casa a eso de las 2.15.
Mi vieja había cocinado arroz con atún. Estaba bárbaro, pero no parecía entender la urgencia y mis ganas de rajar, más allá que le comenté el asunto. Comí, me cambié. Me fui.
Me había fijado antes cómo ir en comoviajo.com. Bueno, me mintieron. Teóricamente el 203 me dejaba ahí en la esquinita. Bueno no. Me dejó 40 cuadras más atrás, en una zona un tanto turbia (se veía más turbia porque llovía un poco y hacía mucho frío). Tardó 55' cuando la página decía 20'.
Lo único bueno de ese bondi era la comodidad de los asientos, la buena onda del colectivero queriendo ayudarme y lo mismo de una señora que se ubicaba un toque más que el colectivero. Apenas me bajé vi el 21, que supuestamente me dejaba, el muy garca del colectivero no paró. Literalmente me miró, sonrió y siguió de largo. Esperé 10' más a otro bondi. Vino un 343. Cuando me estoy por bajar le pregunto por una calle. "No sé...". Chabón, pasás todos los días por este lugar, cómo no sabes las calles??
Cuando me bajo, pregunto a una señora en la parada dónde estaba X calle. Me señaló un lugar, pasando un puente, bla, bla. Pasado el puente (turbio, turbio!), empiezo a caminar, pero no veo ningún nombre de calle. Yo estaba sola y desolada con mi hojita del google maps, que me indicaba que la empresa...fuck. Nuevo nombre para nueva empresa...Aventura? Sí. Aventura :D. Me indicaba que Aventura estaba pegada al lado de otra empresa conocida de galletitas. Yo todavía no veía un solo nombre de calle. Le pregunto a una mina que estaba corriendo por la zona. No tenía ni idea de dónde estaba. Yo de mientras seguía caminando. Me crucé con otra flaca que venía del lado contrario. Me dijo que no sabía cuál era el nombre de la calle de la esquina. Ahora, yo me pregunto...¿es pelotuda la gente?
Por otro lado, yo estaba en crisis. No estaba llorando porque soy muy así, muy "yo puedo", pero tenía ganas de llorar. No sabía dónde estaba y para colmo estaba RE retrasada. Me cruzo a un señor y le pregunto la calle. Me dice "pero, esperá, a dónde querés ir?" "A Aventura". "¡No! Es para el otro lado! Pasando el puente...". Pero la puta...me caminé 10 cuadras lejos del lugar donde tendría que haber ido. Y estaba llegando megatarde. Un policía nos vio caminando de una forma bizarra, me hacía señas como que fuera con él. Me dio mucho miedo.
Al fin llegué a la entrada, había dos de seguridad. Me miran, les digo que tengo una entrevista, me dicen sí sí, pasá. Paso por un seudo pasillo. Me meto en lo que parecería una primera oficina/recepción. Me toman los datos, me preguntan con quién tengo la entrevista, me hacen mostrarles el dni, me dan una tarjeta y me hacen pasar. Había como una cuadra de distancia entre eso y la empresa en sí.
Cuando llego había dos minas súper diosas como recepcionistas. Les digo que tengo una entrevista con tal mina. Me dicen sí, sí, esperá. Esperé en el sillón 15'. De mientras, me calmaba un poco. Estaba traspirada, nerviosa, molesta, irritada, y más cosas parecidas. Cuando al fin la veo, se veía..."normal". Subimos, buscamos oficinas especiales que decían "Sala de Entrevistas", había como tres. Todas ocupadas. Vamos caminando por el lugar, buscando más salas. En lo que en Empresa se llamaba Showrooms, acá en Aventura simil. Así, nos empezamos a recorrer mitad de la compañía, buscando algún lugar libre, cosa que no había. Me dice "no, porque la hora es complicada...", y yo súper apenada, porque llegué 45' más tarde.
Por fin encontramos un lugar. Nos sentamos y me pide el cv. Crisis. No lo tenía! Se lo digo, me dice "bueno, lo tenés en el mail? O en el celular?"...¿Por qué lo tendría en el celular? Lo busco entre los mails, justo no me anda, maldito celular. Le digo, "mirá, lo tengo en hotmail en enviados". Me dejó ir a su pc, abrí hotmail, de pedo en enviados había uno para mi viejo. Lo imprimimos y me dice "Bueno, arranquemos de cero". Ahí empezó. Muchas preguntas: con quién vivís, qué estudiás, debilidades, fortalezas, como te ves en 2 años, cómo en 10 (preguntas capciosas, para las cuales me preguntó también por el lado personal, no sólo laboral. Podría mentir o no, todo para decidir en micro segundos. Le dije la posta: "me gustaría casarme, pensar en hijos, creo que tengo ese toque materno y no me gustaría perderme de tremenda oportunidad". No sé qué me pasó en ese momento, fue un flash, nunca lo había pensado así con esas palabras...); qué sabés de la empresa, qué sabés del puesto (le conté lo que me habían dicho en la primera entrevista, la posta es que no tenía ni idea); qué podés aportar a la empresa (?? amor? alegría?), etc.
Tardamos groso mucho, y no había notado las 17 llamadas perdidas de madre y padre. Resulta que justo padre estaba por la zona, ya que trabaja por ahí y me llevó a casa. Felicidad.
A lo cual, a mi falta de mentiras y excesivo chamuyo comercial supuse que serviría como experiencia de entrevistas, para "entrar en calor", mientras seguía trabajando.
Lo loco fue que me llamaron exactamente una semana más tarde. No podía creerlo.
"Bueno podés ir a la planta hoy a las 3? Porque están un poco complicados, terminando de lanzar una campaña"...etc, etc...
"Mmmm, bueno, no se, quizá si llego, mmmm, bueno dale...".
Nervios.
Corriendo a casa, ¿por qué? Porque para variar había salido más tarde, por cosas de la vida.
Creo que llegué a casa a eso de las 2.15.
Mi vieja había cocinado arroz con atún. Estaba bárbaro, pero no parecía entender la urgencia y mis ganas de rajar, más allá que le comenté el asunto. Comí, me cambié. Me fui.
Me había fijado antes cómo ir en comoviajo.com. Bueno, me mintieron. Teóricamente el 203 me dejaba ahí en la esquinita. Bueno no. Me dejó 40 cuadras más atrás, en una zona un tanto turbia (se veía más turbia porque llovía un poco y hacía mucho frío). Tardó 55' cuando la página decía 20'.
Lo único bueno de ese bondi era la comodidad de los asientos, la buena onda del colectivero queriendo ayudarme y lo mismo de una señora que se ubicaba un toque más que el colectivero. Apenas me bajé vi el 21, que supuestamente me dejaba, el muy garca del colectivero no paró. Literalmente me miró, sonrió y siguió de largo. Esperé 10' más a otro bondi. Vino un 343. Cuando me estoy por bajar le pregunto por una calle. "No sé...". Chabón, pasás todos los días por este lugar, cómo no sabes las calles??
Cuando me bajo, pregunto a una señora en la parada dónde estaba X calle. Me señaló un lugar, pasando un puente, bla, bla. Pasado el puente (turbio, turbio!), empiezo a caminar, pero no veo ningún nombre de calle. Yo estaba sola y desolada con mi hojita del google maps, que me indicaba que la empresa...fuck. Nuevo nombre para nueva empresa...Aventura? Sí. Aventura :D. Me indicaba que Aventura estaba pegada al lado de otra empresa conocida de galletitas. Yo todavía no veía un solo nombre de calle. Le pregunto a una mina que estaba corriendo por la zona. No tenía ni idea de dónde estaba. Yo de mientras seguía caminando. Me crucé con otra flaca que venía del lado contrario. Me dijo que no sabía cuál era el nombre de la calle de la esquina. Ahora, yo me pregunto...¿es pelotuda la gente?
Por otro lado, yo estaba en crisis. No estaba llorando porque soy muy así, muy "yo puedo", pero tenía ganas de llorar. No sabía dónde estaba y para colmo estaba RE retrasada. Me cruzo a un señor y le pregunto la calle. Me dice "pero, esperá, a dónde querés ir?" "A Aventura". "¡No! Es para el otro lado! Pasando el puente...". Pero la puta...me caminé 10 cuadras lejos del lugar donde tendría que haber ido. Y estaba llegando megatarde. Un policía nos vio caminando de una forma bizarra, me hacía señas como que fuera con él. Me dio mucho miedo.
Al fin llegué a la entrada, había dos de seguridad. Me miran, les digo que tengo una entrevista, me dicen sí sí, pasá. Paso por un seudo pasillo. Me meto en lo que parecería una primera oficina/recepción. Me toman los datos, me preguntan con quién tengo la entrevista, me hacen mostrarles el dni, me dan una tarjeta y me hacen pasar. Había como una cuadra de distancia entre eso y la empresa en sí.
Cuando llego había dos minas súper diosas como recepcionistas. Les digo que tengo una entrevista con tal mina. Me dicen sí, sí, esperá. Esperé en el sillón 15'. De mientras, me calmaba un poco. Estaba traspirada, nerviosa, molesta, irritada, y más cosas parecidas. Cuando al fin la veo, se veía..."normal". Subimos, buscamos oficinas especiales que decían "Sala de Entrevistas", había como tres. Todas ocupadas. Vamos caminando por el lugar, buscando más salas. En lo que en Empresa se llamaba Showrooms, acá en Aventura simil. Así, nos empezamos a recorrer mitad de la compañía, buscando algún lugar libre, cosa que no había. Me dice "no, porque la hora es complicada...", y yo súper apenada, porque llegué 45' más tarde.
Por fin encontramos un lugar. Nos sentamos y me pide el cv. Crisis. No lo tenía! Se lo digo, me dice "bueno, lo tenés en el mail? O en el celular?"...¿Por qué lo tendría en el celular? Lo busco entre los mails, justo no me anda, maldito celular. Le digo, "mirá, lo tengo en hotmail en enviados". Me dejó ir a su pc, abrí hotmail, de pedo en enviados había uno para mi viejo. Lo imprimimos y me dice "Bueno, arranquemos de cero". Ahí empezó. Muchas preguntas: con quién vivís, qué estudiás, debilidades, fortalezas, como te ves en 2 años, cómo en 10 (preguntas capciosas, para las cuales me preguntó también por el lado personal, no sólo laboral. Podría mentir o no, todo para decidir en micro segundos. Le dije la posta: "me gustaría casarme, pensar en hijos, creo que tengo ese toque materno y no me gustaría perderme de tremenda oportunidad". No sé qué me pasó en ese momento, fue un flash, nunca lo había pensado así con esas palabras...); qué sabés de la empresa, qué sabés del puesto (le conté lo que me habían dicho en la primera entrevista, la posta es que no tenía ni idea); qué podés aportar a la empresa (?? amor? alegría?), etc.
Tardamos groso mucho, y no había notado las 17 llamadas perdidas de madre y padre. Resulta que justo padre estaba por la zona, ya que trabaja por ahí y me llevó a casa. Felicidad.
A lo cual, a mi falta de mentiras y excesivo chamuyo comercial supuse que serviría como experiencia de entrevistas, para "entrar en calor", mientras seguía trabajando.
Lo loco fue que me llamaron exactamente una semana más tarde. No podía creerlo.
