14 mar 2012

Humor en vivo

Desde el año pasado, me veo a favor de los Stand ups. Soy una cheerleader de primera, la paso bien, me relajo, me río mucho, libero muchas endorfinas.

En febrero fui a ver Ellos con Malena Pichot y Ezequiel Campa. Él me sonaba de algún lado, ella, claramente, de La loca de mierda, junto con todos sus videos en youtube y después en la página de MTV.
Le hago culto a la mina. A algunos les encanta, como a mí, otros la detestan, es cuestión de gustos, obvio.
Pero resulta que me encanta ver a la gente contar, a modo gracioso, las desgracias cotidianas de la vida. Como que uno se puede reflejar en el otro y decir: "La puta! A mí me pasa lo mismo!".
Supongo que es lo mismo con los blogs personales (porque hay blogs de todos tipos: chistes, historietas, culturales, religiosos, políticos, económicos,etc.), cada uno habla sobre lo que sabe, relativamente, y lo que le pasa, o le pasó a alguien más.
No sé cómo me iría en un stand up propio, quizá me voy por las ramas, quizá me agarra pánico escénico, quizá nadie se ríe porque digo tantas pelotudeces en un nivel tan infradotado que no llega a siquiera una sonrisa. O quizá soy grosa, MUY grosa.
La verdad es que no me acuerdo muy bien este primer stand up, osea, me acuerdo qué se habló y demás, pero no me acuerdo mucho de la salida en sí, sólo que mi amiga pidió una cerveza, yo no, porque no me gusta, si tomo, tomo con fanta.
En noviembre del año pasado, a las 2 semanas de salir con mi novio, fuimos a ver devuelta este stand up (él no lo había visto, no le dije que yo sí). Fue muy bueno, quizá mejor que la primera vez, más allá de que repetían varias partes de sus monólogos. El tema es que muchas acotaciones tenían que ver con relaciones, y sexuales, preferentemente, ámbito en que ninguno de los dos había cruzado en ningún aspecto (osea, todo bien, pero no me consideraba "relación" si salí con el flaco 2 veces). Pero eran tantos, pero TANTOS que la cosa ya era ultra awkward, por lo que no podíamos hacer otra cosa que reírnos nerviosamente. Después la flaca tiró un par de chistes religiosos tipo: "Nadie notó que Jesús era un zombie? (todos tipo...wtf?) Osea, el flaco murió. Murió! Y a los tres días se levantó, ¡pará boludo! ¡Disparale!". Perdón gente ultra-mega-archi religiosa, pero me cagué de risa. Fue una teoría genial. Y cuando el cura me cayó mal, se lo conté. No se rió claramente. También se burló de que los colegios religiosos tienen un nombre terriblemente largo. You don't say...!? Jesús en el Huerto de los Olivos.
Habló mucho de la señora Rampolla, de su metodología sobre el papel en cuanto a la explicación de cómo sentirnos más sexies con nuestro cuerpo. Decía una parte algo así como limpiar la casa en bolas. ¿Qué necesidad? Posta! Y de la excesiva utilización de diminutivos para hablar de cosas sexuales, a modo de que todo suena muy tierno, por más ordinario que sea. Male es una capa.
Sumándole a todo esto, dado que era la segunda vez que salíamos, había que "quedar bien", o al menos parecer relativamente normal. La cosa venía bien, muy bien. Al terminar el show mi vejiga explotaba así que fui al baño que quedaba arriba. Obviamente, en el baño de minas había mucha cola, en la de flacos, 3 pibes dando vueltas. Tras esperar 15' y no avanzar nada, una flaca le pregunta a uno de los seguro "acompañantes" si había gente en el de hombres. Él le aseguró que no, por lo que la flaca se mandó junto con otras 2 minas. Mi novio me mira, lo miro, le digo: "¿vos qué decís? Total, no hay nadie y la de minas no avanza nada...". "Dale". Listo, tenía su aprobación. Entro: estaba muuuuuuy limpio, a lo cual hago incapié en el MUY. Entro, había un rollo casi entero de papel higiénico. Cuando voy a cerrar la puerta, veo que al principio no cierra muy bien, se abría. Me agarró la pudorosa (carita ruborizada). La cerré al fin con cierta presión y espasticidad.
¿¡¡Para qué!!? Se me travó la puerta al punto en que no la podía abrir. Primero, la moví un toque. Mi novio estaba del otro lado, junto con otro flaco (el "acompañante") esperando. Sutil, la muevo un toque más. Nada. "Inhalo, exhalo, no pasa naranja". Aplico mayor fuerza y presión y nada. Osea NADA. Pánico. El baño era una decoración naranja, con baldosas negras. Se escuchaba que del otro baño, la otra flaca había salido como si fuera lo más común abrir una puerta en el baño. Bueno, el mío no era el caso. Esto de quedar bien no me estaba funcionando. "Churrasquito..." (nombre alias que le voy a meter a mi novio, muejeje) "....no me abre la puerta". Churrasquito tiene tendencia a decirme relativas obviedades, como cosas que quizá para él no se me hubieran ocurrido, y para mí son common sense. "Empujala!", you don't say...!? La sigo empujando, no pasa nada... Digo bueno, al carajo la femeneidad, hago onda cuerpo (empujar con toda la potencia y el peso del cuerpo. Still nothing. El trata de abrirlo y tampoco. Tira de la manija y nada. a tod esto, yo ya contaba con público: las 3 flacas y el chongo restante. Nice.
"¿Querés que llamemos a alguien del bar?" me preguntaron. "No!, me metí indocumentada en el baño de flacos, osea...". Comprobado que la puerta no se iba a abrir, había sólo dos posibilidades de escapatoria: o por abajo, o por arriba. Por abajo se veía un tanto angosto, y yo no soy delicada de porcelana con un 90-60-90, incapié en la primera parte. Mi análisis fue un: no paso ni en pedo. Por arriba, estaba muy hijaputezcamente alto. Osea, no llegaba a esa abertura ni que me subiera al inhodoro e intentara escalar cual pared de Perú Beach. Estaba complicada. Los dos flacos (novio + ente) estaban tratando de ver cómo podría pasar por arriba, las 3 flacas incitándome a que pase por abajo. "Boluda, por abajo, te agachás y pasás...". "No... no paso..." (en mi voz ya se notaba la crisis y la claustrofobia, osea, estaba en un lugar de 1x1 metro y encima color naranja. No.). "¿Cómo no vas a pasar? Sí pasás, no sos tan gordita como para no pasar" Osea, las minas ya me habían visto físicamente cómo era cuando hacíamos fila afuera y ya habían analizado las probabilidades. O me tiraron lo único esperanzador que les vino a la mente, subieno mi autoestima, claro. Obvio mami que no, pero el tema no era todo mi cuerpo sino específicamente mi parte superior (qué sutil que soy a veces!). "No es eso... Es que tengo...muchas gomas..." (aclaración, nunca sé cuánto es mucho de las cosas, sólo que sé que no es 90, sino unos centímetros más. "Pará... ¿cuántas gomas tenés hija de puta!?" me tiró una. Amorosa....
Después de lo que para mí fue una eternidad, cuando en realidad creo que fueron 10' como mucho, decido mandarme por abajo, rogando lo mejor, y en especial, rogando no quedarme atascada entre el piso y la puerta. Sumémosle el desagrado por los gérmenes a pesar de la excelente limpieza del baño. Sumémosle además que tenía puesta una pollera tubo un tanto corta (por encima de la rodilla). Y si le sumamos que era la 2° vez que salía con Churrasquito, ya me estaba yendo al re carajo. Termino de pasar lo más femenina posible, no se me levantó la pollera, estuve muy pocos segundos en contacto con el piso (regla de los tres segundos!), y me paré rápido estilo "aqui no pasó nada de nada". Mi público sonríe y se va del baño. Quedaban menos de 10 personas en el local. Churrasquito me mira y se entra a cagar de risa. Yo con toda mi coloradez lo único que pude hacer fue lavarme las manos y sonreir....

Bueno, el 15 fuimos con mi novio al stand up de un conocido. Ahora puedo decir conocido, ya que tras leer su blog un año entero, al fin le hablé cara a cara. Fue muy loco. Como que uno se imagina cómo podría ser la otra persona, su voz, su altura, su contextura física, cómo se vestiría, cómo caminaría y cuánto sarcasmo aplicaría en la conversación, no sé, pelotudeces. El señor a conocer era  Ale.
Llegamos 8.30 p.m., estaba semivacío, salvo por un par de flacos tomando algo afuera. Tenía un poco de hambre y sed, hacía mucho calor ese día. Nos sentamos afuera, pedimos algo para tomar y algo de pollo que podría traducirse comúnmente a McNuggets para compartir. Estaban ricos, eran pocos, me quedé con hambre.
A eso de las 9 dijimos: buen, entramos... Había sólo un grupo de 3 personas adentro. Nos tiramos en uno de los sillones. Para variar después de un rato, mi vejiga se hizo presente, obligándome a ir al baño. Tras tropezarme sutilmente hacia la entrada del mismo (es normal que me tropiece al menos una vez por día). Era muy chico, bordó, 2 baños. LLENO de figuritas de fútbol. No me acuerdo cómo se llaman ahora, pero son de esos que tienen la cara de los jugadores. ¿Qué necesidad? Volví. Me gustó mucho el lugar, porque, a pesar de ser un "bar deportivo", con tremenda pantalla para pasar partidos de whatever it is that they like, ponen buena música: tiraban un Nickelback, Pink, Oasis, Green Day, etc... Y los sillones eran una masa.
9.45 seguíamos (o seguía?) con hambre, decidiendo qué pedir por 10'. Entre eso, pasa Ale por delante nuestro y le digo: "Ale?"....Me mira con cara de curiosidad, o bien, cara de nada, a veces se asemejan. "Belu Volponi" "...." (no recognition found) .... "Blog... te escribo seguido..." (N.R.F) "Te mandé un inbox ayer, y te agregué, me aceptaste". "Ah sí, hola!".
Charla pequeña por aquí, charla pequeña por allá... Pedimos unas papas con MUCHO ketchup mientras que el show comenzó aprox 10.30/10.45 p.m.
Ale abrió el show, tiró el mismo chiste que nos dijo antes: "La culpa es del post San Valentín, voy a hacerme el sociólogo y afirmar "la gente salió mucho ayer y no sale dos días seguidos". O por ahí ir un poco más allá y excusarme "lo que pasa es que ayer fue 15 y era cambio de quincena".".
Después se presentó un chabón alto, estuvo bueno. Contaba algo como que en el ascensor ves a alguien X y te ponés a hablar del clima "qué clima de mierda, o qué lindo día", pero cuando tenés un perro tneés una conversación instantánea: "ay que lindo!, mirá que grande, crece más? awwww, lo sacás a pasear seguido?" y termina dándole una vuelta sexual, como que depende si cambiás al perro y dejas las frases armadas la situación puede tener completamente otro sentido. Al señor pareció también llamarle la atención el programa de la venezolana, haciendo acote de que la mujer cada 2 minutos sacaba un "dildito" nuevo ultra mega multitasking. Awesome.
Segunda pasó una flaca con la que me relacioné en un par de cosas: el shampoo que te dan en los hoteles, lo berreta que es, que no te sirven para nada. A lo cual adhiero, es verdad. De purísima casualidad encontrarás alguno que digas "Apa!, not bad at all!" pero sino, no. Y más que nada la comunidad del mate. El odio hacia esa comunidad. Porque es algo muy sencillo: hay una (aunque sea mínima) discriminación para aquellas personas que, como yo, no solemos tomar mate. Como que si pinta mate grupal, es la onda, osea, daaa, amargo man. No. No me da placer el mate amargo, y menos que menos está tan caliente que te quema la lengua. Y es como un sacrilegio el hecho de que no hagas lo mismo que ellos por placer. Osea...no!! "Tomo mate con amigos, tomo mate cuando me aburro, tomo mate cuando tengo hambre, tomo mate como desayuno, tomo mate cuando no puedo dormirme...". No macho, no!! Bancala!
Ale estuvo bueno, habló de su experiencia conviviendo cual amo de casa con su novia. Etc. No les voy a contar, no sean ratas, vayan a verlo ;)
Después estaba la hermana de Ale, la menor de 5 hermanos, se llamaba a sí misma digamos un Cacho más.
Y por último apareció un señor (sí, señor), bajito, quien tomó de punto a un flaco que resultó tener 17 (menor de edad en el bar), con muuuuuchos chistes de gays.
Lo que me llamó la atención, es que pocos se reían de (o con?) la segunda, quien hizo pocas casi ninguna alución a temas sexuales. Sólo cuando lo comentaba era que había más personas que yo riéndose. Si la poníamos en contraste con el primer sujeto, se veía una clara diferencia y quizá preferencia. Público sorete y mal pensado.
All in all, estuvo muy bueno, así que lo recomiendo: Gladiadores en el bar El Coliseo, por Palermo, los miércoles a las 9 p.m. Bonito lugar, bonita la gente.
Y el 28 voy a ir a ver otro Stand up con unas amigas, pero en inglés. Looking forward to it.