Saliendo con un Ario

El 14/06 fue el día mundial de donación de sangre.
La concha de la lora no pude ir porque rendía parcial, y mi vieja ni nadie me hubiera acompañado. Otra vez.
A continuación relatos de las aventuras en rouge:
De tanto esperar y escuchar radio, mi cel se quedó sin batería. OK, cero conexión con el mundo. De mientras, al principio, como había mucha gente estaba parada al lado de la puerta. Entra un chabón con toda y me golpea. NO pidió perdón. Lo veo, parecía milico: pantalones verdes, remera "ajustada" gris, lentes de sol en un lugar sin iluminación (ME PERTURBA LA GENTE QUE USA LENTES DE SOL EN ESPACIOS INTERIORES). Buen, me lo quedo mirando y digo: Mmmm, este individuo "me suena" (no sé de dónde viene esa expresión, pero la suelo usar). Cuando llega mi número para ser recién atendida veo que el individuo me observa pero no hace gestos. Después de un bueeeeen otro rato encontré un asiento libre. En eso es que se me murió el cel. Porque descubrí que el individuo era un scout (para variar! scouts plaga...). Después de una hora de espera y aburrimiento, ya había hecho un avioncito de papel y no tenía nada más para entretenerme.
El individuo, al quedar 4 personas en el salón, se sienta a 1 asiento mío. Lo miro, él me mira de reojo.
"¿Sos el hermano de Anita?". La semana pasada me di cuenta que a veces puedo parecer una psicótica asesina (Pronto... Mica & Flor). Con lo que el flaco me miró, me respondió y se quedó mirando. Que de donde la conocía, de dónde a él, blablabla. Odio tener que tener tacto con ciertas cosas. Cuando hablé por primera vez con un amigo de la facu, ex-alumno de mi colegio, pasaron 2 cosas:
1° no lo iba a saludar a él, sino a mi amigo Seba, que estaba atrás.
2° el tuve que decir que lo conocía porque era compañero de la hermana de mi amiga Emi. Pero no. En su época, fue porque me llegó el comentario de que estaba haciendo quilombo en un viaje a USA del colegio. Cuestión que el flaco pareció...agrandarse? Como si: ahh, mirá la pendeja me fichó de antes... Y no.
Anyways, en este caso le tuve que decir que me lo crucé un par de veces por el colegio por él scouts y yo confi. La verdad era que lo conocí en la misa por la muerte de su viejo y no sabía de su existencia hasta entonces.
Una cosa llevó a la otra, terminamos entrando juntos a donar, hablando de boludeces, y series, y Buffy y Angel (?). La que le sacaba sangre a él no le sacaba los ojos de encima, además de las sonrisitas picaronas y comentarios como: "no te preocupes, yo te cuido". Sumándole cara de odio hacia mi persona porque estaba hablando con él antes.
Mi bolsa de sangre tardó mucho más que la de él en llenarse, por lo que se fue antes. "Nos veremos por ahí". Y quedó.
No sé por qué esa noche lo agregué en el Face, me aceptó. Hablamos mediante notificaciones un tiempo, y fue.
Otra semana pasó lo mismo.
Después me invitó a salir. Accedí, con nada nada de nervios (raro en mí).
El día de la salida fue a un bar, a las 11. No, no tenía nervios, tenía dudas. ¿Qué implicaría la cosa? ¿Qué debería o no hacer? Ante la duda, me gusta tener siempre un back-up plan, así que con una amiga quedamos en que me iba a llamar después de 1 hora, si le decía algo así como "bueno, está bien, ya va a pasar" = todo va bien; sino = "noo, me estás jodiendo? donde? ahora salgo!". Patético, pero puede servir.
Me llevó mi viejo al punto de encuentro, el flaco estaba a media cuadra mía. Me miró sin moverse, esperó a que me trasladara, y no se movió para saludarme. Caminamos 1 cuadra al bar entre medio me tropecé, para variar). Entramos, un lugar tranquilo, él pidió una cerveza, yo un sex on the beach. Nos lo trajeron, su cerveza fue la botella GRANDE. Se la bajó, y pidió otra. Nos trajeron la cuenta, no amagó a pagar él por mis cosas. Obvio que no lo aceptaría, no soy así, no implica nada la salida, no hay strings attached, ergo me pago yo. Pero mínimo exijo la delicadeza de disimular. Ya sé, ya sé, ¿para qué caretearla? Para sumar puntos.
El flaco habló de él, su vida, sus flasheos, sus amigos, sus mascotas, su carrera. A su vez, de mi parte metí un par de bocados a la conversación, pero el chabón me miraba con cierta cara de.. "me chupa un huevo lo que estás diciendo". Hasta que me preguntó si quería jugar al pool. Me ganó, se agrandó en exceso. Después le gané, jugamos por la revancha. Subió la apuesta, el que perdía tenía que besar al otro. Me pareció la apuesta más pelotuda que escuché. Le dije que si yo ganaba, él no iba a decir nada de si se me cantó besarlo o no, y de que salimos a ningún ente scout. Gané. Me lo chapé. No porque se lo mereciera, sino porque tenía ganas (sí, soy alta trola se ve). Fue raro. Fue como tierno. Vino la mina a cobrar lo del pool. Eran $10 mangos. Claramente el señor no amagó. Pagamos $5 y $5. ¬¬
Después fuimos a otro bar que estaba a 3 cuadras porque en el primero nos quedamos sin lugar. De estar caminando abrazados (sí, sí, abrazados) él me abraza de atrás, pero me sonó a gesto "esta es mi hembra". Nosé por qué, pero me sentí un objeto con propietario. Y no me gustó. Después de los 10 minutos de llegar, me llama mi hermano (?) y me dice que antes de las 3 am vuelva (eran las 2.30). ¿Qué carajo? Preocupante. Después llamó mi viejo. A la media hora me fui. Él me acompañó al auto y volvió a entrar al bar/boliche, solo...
En la semana creo que hablé una vez más, me dijo algo así como que quería que lo "apapuchara" porque se iba a dormir. Fue lo más...patético que pude escuchar. Me dijo de salir ese otro finde, le dije que no podía por tema de tiempos. La siguiente semana también. Pero como que si me da paja salir con un flaco, además de todas las contras que tuvo en la única salida, como que no da. Justo tenía un cumple al otro sábado, bella excusa para rechazarle la invitación.
Como era de un amigo que fue scout, cuando salimos de su casa, apareció el Ario con un par de chicos más, me escondí entre las masas y nos fuimos a Crobar en bondi. Él se fue en auto, y no me vio. Al llegar al lugar, cuando estábamos en la cola, apareció mi amigo Franco, a quien le había contado el día de mi salida con él, le preguntó por mí. Se hizo el que no sabía de quién hablaba, que no asociaba con mi nombre ni nada. Y después terminó con un "ahh si, una con la que salí una vez y me comí". Listo. No me dio pena eliminarlo de mi vida (re dramática! jaja).
Pero bueno, ese fue el fin del chico Ario.